Hoy Sophie me preguntó cómo estaba, y le dije lo siguiente:
'Y estoy...... fsadfadsf, así estoy :3'
(Ella me entiende perfectamente cuando le digo algo así)
Y puede ser bastante estúpido o bastante coherente, porque iba en el auto con papá y pensaba que me podía poner de mejor humor pensar en las cosas que no vemos que están en el aire, el peso de un granito de arena, la exactitud de cuando te piden 200 gramos de harina en una receta. Buscaba en mi subconciente una forma para distraerme y no la encontraba. Con el tiempo (habrá sido una hora) me distraje y comencé a darle importancia a otras cosas, como cuando entramos a Musimundo, cuando fui a buscar la camisa a cuadrillé (que no encontré) o cuando vi a la multitud de floggers y me reí a carcajadas en mi fuero interno de ellos. Cuando había en Jumbo una empanada adentro de una copa de vidrio (ya, señores, va en decadencia esto, ¡una empanada!).
Pero acá estoy, en frente del monitor de nuevo, ilusionada inútilmente, viendo que en el buscador de Yahoo mi papá estuvo buscando un hamster (espero que no lo busque para que su pareja homosexual que no sé si existe le meta un tubo de cartón por el ano y deje entrar al animal, para después encender sus bolsas gaseosas con un fósforo para ver si el bicho sale y que salga disparado por su nariz, lo que cause una ruptura en su tabique y le tenga que explicar al doctor que estaba, en una experiencia homosexual, metiendo un hamster por su recto anal) y que ahora está hablando con mi mamá de no sé qué. La verdad, me aburre. La verdad, me da ganas de cagar a tiros a todos, porque esto se llama: estado mamarracho. Buscar la conformidad en cosas que sabés que no te la van a dar, porque adentro lo que sentís es algo como un hamster (que NO entró por tu ano) que roe tus interiores cuando estás quieta, necesitás distraerte pero no con cualquier cosa. Necesitás estar bien, no normal, bien, y estás hecha un mamarracho. Estoy hecha eso de arriba, un mamarracho, más mamarracho que los floggers que había en el Plaza Oeste, más mamarracho que el dibujo del conejo loco del pizarrón que tengo enfrente, más mamarracho que el mamarracho que dibujé y que ven ahí arriba.
Ahora, realmente estoy abierta a propuestas de conversaciones, así que si quieren hablar de cualquier tema o simplemente decirme 'Hola, me llamo Rrrrrrrrraquel, tengo 15 años y soy de El País de Nunca Jamás.' me sentiría contenta de poder leer sus palabras.
'Y estoy...... fsadfadsf, así estoy :3'
(Ella me entiende perfectamente cuando le digo algo así)
Y puede ser bastante estúpido o bastante coherente, porque iba en el auto con papá y pensaba que me podía poner de mejor humor pensar en las cosas que no vemos que están en el aire, el peso de un granito de arena, la exactitud de cuando te piden 200 gramos de harina en una receta. Buscaba en mi subconciente una forma para distraerme y no la encontraba. Con el tiempo (habrá sido una hora) me distraje y comencé a darle importancia a otras cosas, como cuando entramos a Musimundo, cuando fui a buscar la camisa a cuadrillé (que no encontré) o cuando vi a la multitud de floggers y me reí a carcajadas en mi fuero interno de ellos. Cuando había en Jumbo una empanada adentro de una copa de vidrio (ya, señores, va en decadencia esto, ¡una empanada!).
Pero acá estoy, en frente del monitor de nuevo, ilusionada inútilmente, viendo que en el buscador de Yahoo mi papá estuvo buscando un hamster (espero que no lo busque para que su pareja homosexual que no sé si existe le meta un tubo de cartón por el ano y deje entrar al animal, para después encender sus bolsas gaseosas con un fósforo para ver si el bicho sale y que salga disparado por su nariz, lo que cause una ruptura en su tabique y le tenga que explicar al doctor que estaba, en una experiencia homosexual, metiendo un hamster por su recto anal) y que ahora está hablando con mi mamá de no sé qué. La verdad, me aburre. La verdad, me da ganas de cagar a tiros a todos, porque esto se llama: estado mamarracho. Buscar la conformidad en cosas que sabés que no te la van a dar, porque adentro lo que sentís es algo como un hamster (que NO entró por tu ano) que roe tus interiores cuando estás quieta, necesitás distraerte pero no con cualquier cosa. Necesitás estar bien, no normal, bien, y estás hecha un mamarracho. Estoy hecha eso de arriba, un mamarracho, más mamarracho que los floggers que había en el Plaza Oeste, más mamarracho que el dibujo del conejo loco del pizarrón que tengo enfrente, más mamarracho que el mamarracho que dibujé y que ven ahí arriba.
Ahora, realmente estoy abierta a propuestas de conversaciones, así que si quieren hablar de cualquier tema o simplemente decirme 'Hola, me llamo Rrrrrrrrraquel, tengo 15 años y soy de El País de Nunca Jamás.' me sentiría contenta de poder leer sus palabras.
xjulimhx@hotmail.com
Sí, tengo hotmail y no live, porque me parece mejor tener un mail caliente, caliente como el sol que nos está calcinando estos días.
En fin, soy un mamarracho, encantada.
En fin, soy un mamarracho, encantada.
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